Aquel día, por mas que la hubieran besado infinitos labios aquellos la hicieron descartar gran parte del pasado.
Por mas que su vida la llevara al hedonismo inculposo aquel día solo sonrió.
No existe mayor éxtasis que un hombre sin raciocinio que niegue la cordura con el único fin de un beso, de aferrarse a su cuerpo y hacerla olvidar sus sueños....
Ella sonreía, el Nirvana no era suficiente.... de hecho paraíso alguno le permitiría la entrada.
Camino al infierno....
sentada sobre el creyendo estar desnuda solo se entregaba.
camino al infierno....
respirando lentamente, olvidando la realidad y despertando entre susurros de palabras de amor no permitidas
camino al infierno....
escuchando la misma canción, recordando el mismo nombre y sonriendo.
eran de aquellas sonrisas que ocultan lo evidente.
lo evidente no es obvio, pero potencia la malicia de un "quédate hoy y mañana y mañana y mañana y mañana...."