jueves, 22 de abril de 2010

en pocas palabras

pocas veces he estado en esta situacón; cuando encuentro imagenes con textos de pie que no han nacido de mi, pero que son tan poderosos que invocan a la envidia.
la envidia es un pecado perfecto que va de la mano con celos.
pero que reconfortante es sentirla, porque nos lleva a no estancarnos en el area artistica, ya que alla afuera existe más de lo que nuestra mente en su conciente podria visualizr en un segundo.

pero vamos al suicidio.... ¿cuando no se justifica¿?, y ¿cuando sobrepasa la fragil idea de ser una opción?.... ¿cuando el mundo nos confiesa que somos nuestro propio dios?,¿en que momento nos vemos tan fuertes que necesitamos acabar con nosotros mismos o acaso cuando ya sea tarde nadie podra?, ¿este sera el secreto para acabr con la inmortalidad?

yo creo que ese es el secreto tras la muerte proactiva ante la vida; y al ser algo complejo de confesar.... es mejor que te recuerden como un cobarde.

es como las historias de "traidores" de guerra.
la historia se escribe como al poder le conviene.

zoul

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